Estados Unidos asegura estar «preparado» para una guerra con China tras tensión por aranceles
Washington/Pekín. El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, afirmó este miércoles que el país está «preparado» para enfrentar una posible guerra con China, en respuesta a las declaraciones del gigante asiático, que aseguró estar listo para cualquier tipo de conflicto con Washington. La escalada verbal surge en medio de tensiones comerciales crecientes tras la imposición de nuevos aranceles por parte del presidente Donald Trump.
«Estamos preparados. Los que anhelan la paz se preparan para la guerra. Por eso estamos reconstruyendo nuestro ejército», declaró Hegseth durante una entrevista en el programa Fox & Friends , de la cadena Fox News. El titular del Pentágono respondió así a una publicación de la embajada china en X (antigua Twitter), donde Pekín advertía que, si EE.UU. busca una guerra —ya sea arancelaria, comercial o de otro tipo—, «estamos dispuestos a luchar hasta el final».
Tensión derivada de los aranceles
La postura china llega como respuesta a los recientes aranceles impuestos por Trump, que incluyen gravámenes del 20% a las importaciones chinas y del 25% a productos provenientes de México y Canadá, medidas que entraron en vigor el martes. Estas políticas forman parte de la estrategia proteccionista del presidente estadounidense para equilibrar la balanza comercial y presionar a sus socios internacionales.
Sin embargo, la reacción de China ha elevado la retórica a niveles inusuales. En su mensaje, la embajada china destacó que el país no teme enfrentar cualquier desafío que Washington imponga, ya sea económico o militar.
Estados Unidos asegura estar «preparado» para una guerra con China
El «ethos guerrero» de Estados Unidos
Durante su intervención, Hegseth subrayó que el aumento del gasto en defensa y la modernización tecnológica son esenciales para mantener la seguridad nacional. «Vivimos en un mundo peligroso con países poderosos y de ideología muy diferente, que están aumentando rápidamente su gasto en defensa y tecnología moderna», explicó.
«Quieren suplantar a EE.UU. Si queremos disuadir la guerra con los chinos u otros, tenemos que ser fuertes», añadió. Sin embargo, Hegseth destacó que, aunque Trump mantiene una relación personal sólida con el presidente chino, Xi Jinping, su responsabilidad como secretario de Defensa es garantizar que el país esté listo para cualquier escenario.
Enfoque en el Indo-Pacífico
Hegseth también destacó que el Pentágono está concentrando sus esfuerzos en fortalecer la postura militar de EE.UU. en la región del Indo-Pacífico, un área estratégica clave frente al creciente poderío chino. «El gasto en defensa, las capacidades, las armas y nuestra presencia en el Indo-Pacífico son prioridades absolutas», señaló.
Este enfoque refleja la preocupación de Washington por la influencia geopolítica de China en la región, particularmente en áreas como Taiwán, el Mar de China Meridional y las cadenas de suministro globales.
¿Guerra o disuasión?
Aunque ambos países han adoptado posturas firmes, Hegseth insistió en que EE.UU. no busca un conflicto directo. Sin embargo, dejó claro que el país debe estar preparado para cualquier eventualidad. «No queremos una guerra, pero debemos estar listos para defender nuestros intereses y aliados», concluyó.
Por su parte, analistas advierten que la escalada retórica podría tener repercusiones económicas y políticas significativas, especialmente en un contexto global marcado por la incertidumbre. Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención cómo evolucionará esta disputa entre dos de las mayores potencias mundiales.