La atrofiada democracia feudal
LECTURA POLÍTICA por: Noé Mondragón Norato
Progresivamente, las condiciones políticas se están dando para que los alcaldes de la región Tierra Caliente tomen decisiones “por su cuenta” y sin tomar en consideración a los partidos políticos que los postularon. Menos al Congreso local, convertido en testigo mudo y sordo de todas esas trapacerías sustentadas en la ilegalidad. Eso es justo lo que dejó entrever el dirigente estatal del PRD, Alberto Catalán Bastida, con relación a las acciones contra la fiscalía General del Estado (FGE) emprendidas por el alcalde sustituto del municipio de San Miguel Totolapan, el perredista Fredy Vázquez Palacios. Hay que ir a las vertientes.
EDILES “AUTÓNOMOS”. – En los hechos, los alcaldes calentanos tomaron el control de sus municipios. O los obligaron a que así actuarán. Y los actores políticos partidistas los miran de soslayo. Rehúyen involucrarse en una región que arde por el control político de valores entendidos, ejercido por un grupo delictivo. Las lecturas son obligadas:
Congreso de Guerrero complice de alcaldes
1.- La rebelión de los alcaldes comenzó con el cierre de accesos y carreteras que conducen a esa región durante el pasado “puente” que inició el viernes 28 de abril. Primero se dijeron “amenazados de muerte” por otro grupo delictivo contrario. Luego, protestaron contra los decomisos operados en aquella región por la FGE. Actuaron fuera de su investidura y violando la libertad de tránsito contemplada en el artículo 11 de la Constitución. Se convirtieron en infractores de la ley. El Congreso local estaba obligado a llamarlos a deponer su actitud bajo la amenaza legal de fincarles juicio político. La mayoría de esos ediles gobiernan bajo las siglas del PRI y PRD. Y por supuesto, ninguna de estas fracciones legislativas abrió debate en ese recinto con relación a esos reprobables hechos. Optaron por hacerse los disimulados. Y los del Morena también callaron. Complicidades de valores entendidos.
Congreso de Guerrero incompetente ante la atrofiada democracia feudal
2.- La desobediencia de los alcaldes se replicará irremediablemente durante la próxima elección de julio de 2024. Incluso, el proceso de selección para la competencia electoral podría escapar del control político de las dirigencias nacional y estatal del Morena, PRI y PRD. Porque si bien el dirigente estatal del partido del sol azteca Alberto Catalán reconoció que el alcalde sustituto de San Miguel Totolapan, Fredy Vázquez fue designado a propuesta de un grupo de ciudadanos “de la estructura política” del alcalde asesinado Conrado Mendoza, regidores y de la síndica, “la decisión se tomó allá”. Es decir, no pasó ni por la dirigencia nacional ni estatal del PRD. Tampoco por la obligada intervención del Congreso local. Catalán Bastida se deslindó literalmente de un alcalde de su partido que dejó de seguir las directrices políticas perredistas. Y ahora se manda solo.
Inevitable incursión de grupos delictivos en tomas de decisiones públicas
3.- Bajo esa dinámica, es previsible entonces que los candidatos a las alcaldías en aquella región para la elección de 2024 se decidan directamente por parte de “los ciudadanos” de la Tierra Caliente y no en las sedes estatales partidistas. Una especie de “democracia forzada”. Obligada por las inéditas y asombrosas circunstancias. De no ser así, las rebeliones de los alcaldes y de los aspirantes a sucederlos, se recrudecerán. Pondrán contra la pared a todos los partidos políticos. De hecho, el gris y anodino dirigente estatal del PRI, Alejandro Bravo Abarca parece indispuesto a involucrarse demasiado en esa toma de decisiones. Contrario a ello pelea internamente por sobrevivencia política. Y para no ser expulsado de esa dirigencia por el inefable, arrabalero y cómico dirigente nacional priista Alejandro Moreno Cárdenas, Alito. Y es previsible que el del PRD tampoco. Igual a como ocurre en la UAGro, en la región Tierra Caliente los personajes que controlan los presupuestos públicos las han convertido en sus respectivas ínsulas de poder. Territorios blindados contra cualquier intento de intervencionismo por parte de otras autoridades. Nacionales y estatales. Porque las normas y las leyes son impuestas por ellos. O por los poderes fácticos que los controlan. La disputa por el poder público se fragmenta así, en inminentes y “modernos” señoríos feudales. Lugares infames donde los siervos de la gleba no tenían derecho ni de salir ni de ser expulsados de sus parcelas. Una especie de atrofiada y sombría democracia feudal está brotando de gobiernos y partidos políticos en México, derivado de la inevitable incursión de los grupos delictivos en las tomas de las decisiones públicas. Y lo que es peor: en pleno siglo 21.
Canibalismo político.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Los que operaban bajo la sombra del finado empresario y ex alcalde de Acapulco, Luis Walton Aburto, iniciaron un proceso de evidente canibalismo político. Es decir, se quieren colgar de su figura pública. Y, por otro lado, erigirse como “receptores de su legado político”. Como si este hubiese sido amplio y verdaderamente trascendente. En realidad, el propósito central de todos esos personajes caídos en desgracia de poder consiste en ofertarse rentablemente ante el único aspirante presidencial del Morena que garantiza el retorno de priistas, perredistas, emecistas y panistas a la esfera pública: el canciller Marcelo Ebrard, a quien ya le encendieron la vela más grande y vistosa del entorno político local.
