Narcisismos de dos
LECTURA POLÍTICA por: Noé Mondragón Norato
Uno de los intelectuales más aborrecidos por el presidente AMLO, es Guillermo Sheridan, quien con un humor ácido y corrosivo lo exhibe recurrentemente en sus escritos. Y en consecuencia ha sido mencionado y fustigado en varias de las “mañaneras”. Sin embargo, en su libro Paseos por la Calle de la Amargura y Otros Rumbos Mexicanos, Sheridan establece un parámetro razonable y puntilloso sobre el narcisismo.
En el capítulo “El narcisista omnipotente” señala que, «como alteración psíquica le ha sido diagnosticado a no pocos mandamases e, invariablemente, a los dictadores plenipotenciarios, su expresión extrema…Ese narcisismo suele recostarse sobre la convicción, habitualmente asumida por tales criaturas, de que sus patrias respectivas han encarnado en ellos…Produce una angustia que sólo se ve aplacada por la veneración multitudinaria, la loa estrepitosa y la salivación popular…El presidente sale al balcón el día del grito, y la tierra trepida y la muchedumbre muge. Y cuando grita “¡Viva México!” lo que realmente grita es “¡Viva yo!”». En ese cuadro encajan las fotografías de algunos mandamases de Guerrero, mareados por el poder. Empecinados en vender y resaltar esa aura vanidosa.
NARCISISMOS POLÍTICOS. – Generalmente, el ejercicio del poder despierta el narcisismo escondido de muchos de sus actores. En ese trayecto, a estos personajes les importa muy poco perder el piso. Rebasar las fronteras del autoelogio abierto o implícito, que al final el ciudadano común termina por mofarse de ellos y observarlos repulsivamente. Se lee así:
Abelina López Rodríguez
1.- Tras rendir su segundo informe, la alcaldesa morenista de Acapulco, Abelina López Rodríguez, fue obligada a exhibir su narcisismo por parte del ineficaz y marrullero secretario de educación, Marcial Rodríguez Saldaña. “Ofendido” por la llegada de Marcelo Ebrard a dicho evento, el funcionario educativo —que se muestra impasible ante el conflicto en esta materia— se salió del informe aduciendo que “era un acto político, de grupo y personal”. Dolida por las palabras con evidente filo político esgrimidas por esa corte Marcial, la alcaldesa soltó ufana y sin ningún tipo de rubor: “yo respeto opiniones, pero el pueblo estuvo ahí, el pueblo me ama”.
Este amor fingido, convenenciero y simulado del que presume la alcaldesa, no se mide por el nivel real de su eficacia como autoridad —se muestra abiertamente incompetente con la violencia y el crimen que día tras día tiñen de sangre ese puerto turístico—, sino por las encuestas pagadas con recursos del ayuntamiento, que hipotéticamente la ubican en el primer lugar de las preferencias electorales.
Aunque para efectos de la selección de candidatos o su posible reelección, Abelina no debe olvidar que el presidente AMLO siempre tiene “otros datos” al respecto. Y ella, por las señales arrojadas en su reciente visita a ese puerto, no está en el ánimo presidencial. Su narcisismo no le sirve de mucho en una coyuntura política en la que el Morena podría tumbarle todo: reelección, senaduría o diputación federal.
Arrogancia y Narcismo
2.- En un acto de arrogancia y marcado narcisismo, el rector electo de la UAGro, Javier Saldaña Almazán convocó a una multitudinaria marcha el pasado 5 de mayo en Chilpancingo, con el fin de que todos esos acarreados lo “acompañaran” en su registro como aspirante a rector.
Cálculos conservadores aseguraron que había reunido unas 15 mil personas. Otros rebatieron la cifra y la ubicaron en los 20 mil presentes. ¿Para qué gastar tanto dinero en ese acarreo ofensivo cuando Javier sabía que sus operadores le habían planchado el terreno con el fin de enviarlo a competir en soledad tal y como ocurrió? Y para atizarle más a su propio narcisismo, vendió la idea de que esa marcha era también para “defender la autonomía universitaria”.
De un sólo golpe se asumió como la encarnación de la autonomía en la UAGro. Y como estaba en peligro de ser vulnerada por sus adversarios internos, había que cerrar filas en torno a su “importante figura y jerarquía”. Esa que se construyó a través de «la veneración multitudinaria, la loa estrepitosa y la salivación popular» como escribió Sheridan. O mejor: como en el otro paralelismo narrado en su libro: “la autonomía soy yo”.
Experredistas
HOJEADAS DE PÁGINAS…Algunos experredistas buscan meterse e influir en las próximas candidaturas a cargos de elección popular en el Morena. Como en el pasado, asumen contar con los méritos suficientes para ser considerados. Uno de los que acaba de brincar, es el exregidor del partido del sol azteca por Acapulco, Horacio Bahena Bustamante. Y como si su ex partido hubiese sido realmente democrático —esa democracia atrofiada y percibida desde los intereses personales—, se pronuncia porque esta vez “no haya dedazo ni acuerdos en lo oscurito”, como si su postulación como regidor hubiese sido en su momento, diáfana y no imposición de tribus. El colmo es que dicho personaje se deslindó del senador Toro y de la alcaldesa Abelina López. Los redimidos “izquierdistas y demócratas del PRD”, buscan aplicarles a los morenistas en la coyuntura, aquel viejo refrán popular: “de afuera vendrán y de tu casa te sacarán”.