Obispo: señalamientos de escándalo
LECTURA POLÍTICA por: Noé Mondragón Norato
Si se atiende lo dicho por el prelado católico Salvador Rangel Mendoza, en otra de sus polémicas entrevistas, esta vez con la agencia de noticias Quadratín, la alcaldesa de Chilpancingo, la morenista Norma Otilia Hernández Martínez efectivamente, no estaba negociando con el presunto líder criminal de Los Ardillos, sino negándose a que Los Tlacos abandonaran la plaza. Directamente, Rangel Mendoza estableció que el acuerdo verdadero de la alcaldesa capitalina es con el grupo criminal de Tlacotepec. Pero también embarró a otros políticos que habían navegado con banderas de omisión y de una falsa honestidad. Ajena a los grupos delictivos. Las revelaciones están causando zozobra y angustia en todos aquellos destinatarios de esos mensajes.
EL SENTIDO DE LOS ACUERDOS. – Hay varios puntos que guardan sentido con relación a la explicación de la violencia desbordante en la capital del estado: el hecho consumado de que Los Ardillos ganaran en la pasada elección de 2021, todos los municipios del corredor Río Azul bajo el camuflaje de la alianza PRI-PRD. Y el Morena ninguno. Rangel Mendoza —abriéndose sin ningún recato como literal vocero de ese grupo delictivo— puso otra vez el dedo en la llaga. Se lee así:
Norma otilia exibida por el prelado
1.- Norma Otilia Hernández fue exhibida y literalmente, vuelta a poner en jaque. Ahora por el prelado: “hay 40 minutos más de grabación” y “la alcaldesa no quiere deslindarse de Los Tlacos y si no se desliga, no van a acabar los problemas en Chilpancingo”, sostuvo en la entrevista. Eso presupone que las embestidas violentas por la disputa de la plaza capitalina entre ambos grupos delictivos crecerán exponencialmente. Con los consecuentes baños de sangre. Salvador Rangel deslizó entre líneas que la permanencia de la alcaldesa morenista no garantiza que se genere ese acuerdo. Y, por lo tanto, sutilmente lo dejó entrever: debe irse.
El obispo también señala a Mario Moreno Arcos
2.- En el mapeo de los acuerdos soterrados e inconfesables, el obispo emérito señaló que al excandidato a gobernador por el PRI-PRD, Mario Moreno Arcos, fueron Los Ardillos y Celso Ortega los encargados de organizarle “los dos mejores mítines de la región centro durante su pasada campaña por la gubernatura”. Desde luego, Moreno se deslindó del señalamiento. Y al igual que Norma Otilia dijo que esa declaración “ponía en riesgo a su familia” pero asumió que no denunciaría a Rangel. Es obvio. Porque de hacerlo, verdades más amargas podrían salir a relucir. Otro de los políticos alcanzados por la verborrea fulminante del representante de la mitra, fue el dirigente estatal del PRI, Alejandro Bravo Abarca, de quien dijo “le pidió hablar con un jefe criminal de la región centro para resolver un tema”. Esta petición se hizo cuando el actual dirigente estatal tricolor se desempeñaba como jefe de la oficina del exgobernador Héctor Astudillo. ¿Qué tema inconfesable pretendía resolver Alejandro Bravo con un líder criminal? ¿O acaso asumiría como un enviado y representante del propio Astudillo? Alcanzado por esas fuertes llamas, el dirigente estatal del PRI no asistió ayer miércoles a la ceremonia con la cual se conmemoró el segundo aniversario luctuoso del exgobernador René Juárez en la sede tricolor. Huyó esta vez, pero de otras llamaradas: las mediáticas.
Radiografia electoral que refrenda los dichos del obispo emérito
3.- En todo el corredor Río Azul, incluidos los municipios de Tixtla, Chilapa, Hueycantenango y Zitlala, ganó la alianza PRI-PRD durante la pasada elección de 2021. También los dos distritos locales —el 24 donde triunfó Bernardo Ortega, hermano de Celso y el 25 ganado por el también polémico exedil priista de Chilapa, Jesús Parra García— y la diputación federal con Fabiola Rafael Dircio en el distrito 6. Una radiografía electoral que refrenda los dichos del obispo emérito: el Morena no pudo entrar a ganar en ese territorio ninguna alcaldía, diputación local ni la federal. Y lo que también dejó entrever entre líneas el prelado católico, es que eventualmente en la próxima elección federal de 2024, tampoco podrá entrar. Y ese es el mensaje central enviado al presidente AMLO. Es decir, su eventual candidata presidencial Claudia Sheinbaum y el Morena no ganarán en ninguno de esos municipios ni distritos. Porque la negociación está atorada. Y la alcaldesa Norma Otilia está segura de que “ya la libró”. Pero si el presidente AMLO la sostiene, el costo político-electoral será muy alto para el Morena. Y si no, al tiempo.
Acuerdos inconfesables
HOJEADAS DE PÁGINAS…Al responsabilizar de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, a “las altas instancias del Estado, implicadas con el crimen organizado”, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) reafirmó la parte tumefacta del asunto que nadie con poder quiere ver: la violencia con origen en esos acuerdos inconfesables sigue poniendo en riesgo a los testigos del caso para llegar a la verdad. El presidente AMLO llegará a su quinto informe sin dar respuestas certeras a una promesa de campaña que, al parecer, se quedará reducida a eso. Y otra vez los votos cautivos para el Morena podrían desvanecerse por obra y gracia de la indolencia gubernamental.
